Ultimamente estamos siendo atacados por todo tipo de "eventos extremos", las grandes sequías son resueltas con lluvias copiosas desalmadas que inundan por doquier...
Ya no son válidos los argumentos de que todo son ciclos más o menos regulares, y que despues del caos viene la bonanza. Ni los lugareños más viejos recuerdan singularidades como los hechos actuales.
Esta semana hemos superado con creces los 40 grados. Imposible estar en la ciudad....
Ya no son válidos los argumentos de que todo son ciclos más o menos regulares, y que despues del caos viene la bonanza. Ni los lugareños más viejos recuerdan singularidades como los hechos actuales.
Esta semana hemos superado con creces los 40 grados. Imposible estar en la ciudad....
...hacia la montaña...
...llegada a la Font Blanca, un amado enclave de los palentófilos...
...en otro tiempo, millones de años atrás, hacia el Cretácico superior, cuando las montañas aún eran mares, la Font Blanca, era un territorio marino de una lengua del oceano Atlántico, entre el Macizo de Aquitania y el Macizo del Ebro.
En la actualidad podemos apreciar los vestigios de aquel atolón coralino en toda la zona, a modo de "piedras" de coral que encontramos en cualquier afloramiento.
...basta con fijar la vista en el suelo, y nos daremos cuenta que la mayoría de piedras que encontramos en el camino tienen "dibujos"...
...incluso las más reducidas...
Encontraremos aulosmilias, placosmilias, cunnolites, radiolites, hippurites, cycloseris, alveolinas, gasterópodos, equinodermos...
...toda una fauna de invertebrados marinos de unos 70 millones de años de antigüedad.
...un perfecto almuerzo a la sombra, con el continuo murmullo del agua de la fuente como banda sonora...
...y cómo no una visita refrescante a la Font de la Figuera, donde las frías aguas imponían respeto...
...I LOVE MONTSEC...
...llegada a la Font Blanca, un amado enclave de los palentófilos...
...en otro tiempo, millones de años atrás, hacia el Cretácico superior, cuando las montañas aún eran mares, la Font Blanca, era un territorio marino de una lengua del oceano Atlántico, entre el Macizo de Aquitania y el Macizo del Ebro.
En la actualidad podemos apreciar los vestigios de aquel atolón coralino en toda la zona, a modo de "piedras" de coral que encontramos en cualquier afloramiento.
...basta con fijar la vista en el suelo, y nos daremos cuenta que la mayoría de piedras que encontramos en el camino tienen "dibujos"...
...incluso las más reducidas...
Encontraremos aulosmilias, placosmilias, cunnolites, radiolites, hippurites, cycloseris, alveolinas, gasterópodos, equinodermos...
...toda una fauna de invertebrados marinos de unos 70 millones de años de antigüedad.
...un perfecto almuerzo a la sombra, con el continuo murmullo del agua de la fuente como banda sonora...
...y cómo no una visita refrescante a la Font de la Figuera, donde las frías aguas imponían respeto...
...I LOVE MONTSEC...