El Tarot debierea ser algo más que la interpretación aleatoria de unos cartoncitos dibujados, o unas piedras rúnicas, o unos posos de café en el fondo de una taza.
De hecho es algo más amplio y abstracto. Realmente no son necesarias ni cartas, ni piedras; son solo herramientas ambiguas que plasman una idea general que hay que desgranar o aglutinar.
En este caso (anónimo) el consultante viene de un torbellino de ideas confusas, de un principio sin fin, donde todo es posible en apariencia, la locura es el punto de partida de esta consulta simbolizando el alfa omega, donde todo es perfecto engañosamente (es la carta sin número).
El camino toma la direción de la incansable búsqueda utópica, simbolizando la Trinidad sobre el Grial. Se intenta la perfección, el cambio hacia lo superior, la búsqueda de la verdad.
En esta búsqueda hay una serie de elementos coincidentes entre los que destaca en primer lugar (carta superior) la añoranza de recuerdos, es como vivir oculto en el pasado por temor al futuro, algo reflejado en los recuerdos de otras épocas. Y en segundo lugar (carta inferior) ocurre algo que ataca la ética positiva del individuo, llevándolo a un plano de corrupción y desenfreno.
Todo ello conlleva a una visión (carta central) de tensión "sosegada", es la guerra santa, un deber de exterminar al enemigo y a la vez una condecoración y una entrada al paraiso. Repito es la guerra santa que hace que te levantes de las cadenas que te oprimen, y grites al cielo, quiero ser libre y luchar contra la opresión, en la ética asumida de tener toda la razon de tu parte para hacer lo que estás haciendo.
De hecho es algo más amplio y abstracto. Realmente no son necesarias ni cartas, ni piedras; son solo herramientas ambiguas que plasman una idea general que hay que desgranar o aglutinar.
En este caso (anónimo) el consultante viene de un torbellino de ideas confusas, de un principio sin fin, donde todo es posible en apariencia, la locura es el punto de partida de esta consulta simbolizando el alfa omega, donde todo es perfecto engañosamente (es la carta sin número).
El camino toma la direción de la incansable búsqueda utópica, simbolizando la Trinidad sobre el Grial. Se intenta la perfección, el cambio hacia lo superior, la búsqueda de la verdad.
En esta búsqueda hay una serie de elementos coincidentes entre los que destaca en primer lugar (carta superior) la añoranza de recuerdos, es como vivir oculto en el pasado por temor al futuro, algo reflejado en los recuerdos de otras épocas. Y en segundo lugar (carta inferior) ocurre algo que ataca la ética positiva del individuo, llevándolo a un plano de corrupción y desenfreno.
Todo ello conlleva a una visión (carta central) de tensión "sosegada", es la guerra santa, un deber de exterminar al enemigo y a la vez una condecoración y una entrada al paraiso. Repito es la guerra santa que hace que te levantes de las cadenas que te oprimen, y grites al cielo, quiero ser libre y luchar contra la opresión, en la ética asumida de tener toda la razon de tu parte para hacer lo que estás haciendo.
1 comentario:
concuerdo contigo completamente, pero tanto las runas o piedras como las cartas de tarot, son herramientas de ayuda a mi parecer.
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